MEXICALI, 25 marzo de 2020 (Especial/únicoBC).- Como medida de prevención y para salvaguardar a sus empleados en medio de la contingencia de salud generada tras la declaratoria de pandemia que recibió el COVID-19 por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS), diferentes organizaciones empresariales han optado por migrar a la modalidad de teletrabajo para aquéllos colaboradores con actividades laborales que puedan desarrollarse desde casa.
Sin embargo, esta medida sanitaria podría ser la pauta que demuestre si México está o no preparado para que el teletrabajo o home office sea reconocido como un esquema laboral formal, que pueda aplicarse sin importar el tamaño o el enfoque de las empresas.
En ese sentido, la C.P. Omara Gutiérrez, alumna de la Maestría en Administración de Negocios (MBA por sus siglas en inglés) en CETYS Universidad Campus Mexicali explicó que, para lograr una adecuada implementación del teletrabajo, con la cual demostrar a la empresa que es una modalidad productiva e igual de eficiente que el trabajo presencial, los colaboradores deben seguir los siguientes consejos:
1.- Revisar a detalle el organigrama de la organización e identificar los puestos de trabajo que puedan desarrollarse en la modalidad de teletrabajo.
2.- La empresa tiene que realizar un autodiagnóstico en función de conocer si cuenta con los insumos tangibles e intangibles necesarios para brindar lo mínimo indispensable a los colaboradores que trabajen desde sus casas, por ejemplo, la asistencia ante fallas informáticas, así como de higiene y seguridad.
3.- Elaborar y celebrar contratos de confidencialidad del traslado de la información.
4.- Definir objetivos claves y esquemas de comunicación entre empleado y supervisor durante las jornadas de teletrabajo.
El éxito de la modalidad de teletrabajo se determina en gran parte por una serie de factores y características del empleado que la implementa, consideró el Ing. Jorge Ramírez, estudiante del MBA en CETYS Universidad Campus Mexicali, ya que en el proceso intervienen factores como la personalidad, habilidades de comunicación y liderazgo, dominio de la tecnología y capacidad de toma de decisiones asertivas, así que “No todos los empleados pueden ser teletrabajadores”.
Beneficios y retos del teletrabajo
Por su parte, la maestrante en Administración y Negocios Loida Saijas, detalló que laborar de manera remota puede reportar importantes beneficios que impactan directamente en el bienestar del capital humano de una empresa, por ejemplo, al no tener que trasladarse de un lugar a otro se vuelve un ente global que puede aspirar a posiciones nacionales e internacionales dentro de la organización, obteniendo además flexibilidad en los horarios, autonomía y ahorro de costos.
En lo que al teletrabajo respecta, el principal reto para México es la poca claridad en la regulación del marco legal del art. 123 de la Carta Magna así como de los artículos 311 al 330 de la Ley Federal de Trabajo, explicó Saijas.
Finalmente, los estudiantes del MBA en CETYS Universidad Campus Mexicali coincidieron en que el éxito de la aplicación del teletrabajo recae en respetar acuerdos, establecer alcances y objetivos, así como observar la viabilidad de adaptarse a la cultura organizacional de la empresa.
Para saber más:
Los estudiantes Gutiérrez, Ramírez y Saijas, elaboraron una guía de buenas prácticas en el teletrabajo, en la que contemplan instrumentos de autoevaluación de la compañía, empleado, supervisor, análisis de puestos, como parte de su proyecto integrador para obtener el grado de Maestros en Administración y Negocios, que próximamente estará disponible para todo aquel interesado en el tema.
En el octavo punto de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Organización de las Naciones Unidas se contempla al teletrabajo como una forma de promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos.