MEXICALI.- Hace tan solo unos pocos años, si alguien miraba a un hombre con tatuajes, lo más común era que se pensara que se trataba de un exconvicto, un delincuente, un usuario de drogas o todo lo anterior, ver a una mujer con tatuajes era mucho peor.
Annie Equihua no solo porta con orgullo sus tatuajes, sino que es tatuadora profesional, oficio del que abrió paso para las mujeres y que al pasar de los años se han sumado muchas más. Y no solo eso, también es educadora en un Jardín de Niños.
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