TIJUANA, 14 junio de 2020 (Especial/únicoBC).- El Gobierno de Baja California convocó a los tijuanenses a no bajar la guardia en las medidas sanitarias por COVID-19, aunque la ciudad ya presenta las características para avanzar hacia la coloración naranja de la «Nueva Normalidad»; no obstante, el tránsito en el semáforo sanitario debe darse por entidad federativa.

 

Acompañado por el secretario de Salud, Alonso Oscar Pérez Rico, el Gobernador de Baja California, Jaime Bonilla Valdez, convocó en esta ocasión al Presidente Municipal de Tijuana, Arturo González Cruz, para abordar el tema de los bares, «table dance» y cantinas, que sin autorización oficial reabrieron en días pasados sus establecimientos en esta ciudad.

 

El mandatario estatal aclaró este gobierno no esconde nada, y no acepta tajadas para dejarlos trabajar, y que la Secretaría de Salud no les ha autorizado reanudar sus actividades.

 

Puntualizó que muchos bares abrieron sus puertas al público, lo que provocó que estos lugares tuvieran una gran afluencia de personas. «Tijuana, está en la fase 5 de la pandemia, lo que significa la etapa final. No respetaron el color rojo del semáforo, y aun así, permanecieron abiertos», señaló.

 

En este contexto, el primer edil de Tijuana, especificó que solo algunos giros comerciales están autorizados, como es el caso de los restaurantes, siempre y cuando cumplan con las medidas sanitarias, de no ser así, los tendrán que cerrar.

 

«Los bares, cantinas y table dance, no están autorizados para trabajar. Estamos en coordinación con el Gobierno en Marcha, que encabeza el gobernador Jaime Bonilla Valdez, Reglamentos Municipales y la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM), para llevar a cabo operativos y cerrar negocios que violen la ley», expuso el Presidente Municipal.

 

Por otra parte, mencionó que los parques y algunos lugares de esparcimiento están abiertos bajo estrictas medidas de seguridad, con aforos reducidos del 25%. En el caso específico para la reactivación de los mercados sobre ruedas, también se manejarán con un tráfico de personas controlado, y los vendedores ambulantes, deberán exigirles a sus clientes el uso de cubre-bocas.

 

Para reforzar este comentario, el secretario de Salud, Alonso Pérez Rico, dijo que es muy importante tener en la balanza, lo que es «salud y vida, bienestar y economía»; y que para el regreso seguro a la «Nueva Normalidad», ha sido importante la intervención de los tres niveles de gobierno para que Tijuana, transite junto con el resto del estado al semáforo naranja.

 

«Todas las áreas sociales, rubros y giros comerciales deberán respetar las medidas sanitarias, no queremos una segunda ola de COVID-19». Agregó.

 

El funcionario estatal, citó como ejemplo la ciudad de Mexicali, que tiene mil 200 casos confirmados de coronavirus, por encima del municipio de Tijuana, lo que ha dificultado aplanar su curva epidemiológica, por omitir las indicaciones de la autoridad de salud. 

 

El titular de la Secretaría de Salud, destacó que el Albergue Tijuana, para personas vulnerables de COVID-19, cuenta con 40 camas, y que atiende a pacientes en recuperación, es un modelo único en todo Latinoamérica.

 

También hizo mención que la unidad auxiliar hospitalaria de la UABC en Mexicali, recibirá este domingo 14 de junio a pacientes del Hospital General de Mexicali, para despresurizar su ocupación que casi llega al 90%.

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